lunes, 21 de enero de 2013

Chapatis con crema de queso

El pan Chapati es típico de países como India y Pakistán. Se utiliza como una cuchara para tomar los alimentos o para acompañar sopas u otros platos. Se parece al pan tipo Pita ya que es redondo y plano.


Pan

  • Mezclamos 100 gramos de harina integral*, una pizca de sal marina* y una cucharada de aceite de oliva de primera presión en frío*, preferiblemente alto oleico, en un bol.
  • Formamos un hueco en el centro y añadimos agua revolviendo desde el centro hacia afuera hasta tomar una masa que no se pegue.

  • Amasamos espolvoreando la mesada con harina para desarrollar gluten.


     
  • Formamos bollitos del tamaño de nueces, bollamos conteniendo el bollo en el palma de la mano haciendo una leve presión en la mesada de trabajo, hasta obtener en la parte inferior del bollo un ombligo.


  • Los cubrimos para que no se resequen y los dejamos descansar.
  • Calentamos mucho una plancha sartén gruesa.
  • Estiramos los bollitos con palote, realizando movimientos largos, hasta formar discos de 1 mm de espesor.
  • Uno a uno, los colocamos sobre la plancha hasta que se comiencen a formar globitos en la superficie. Justo ahí los retiramos con una espátula y los damos vuelta en la misma plancha.

  • Una vez que se infla la masa, la retiramos del fuego y apilándolos los panes para que no se sequen.
    Los panes se pueden congelar antes de cocinarlos.

Crema de queso

  • Lavamos y dejamos en remojo una taza de las semillas de girasol o almendras o castañas de cajú o nueces de la manera que comiencen el proceso de activación*.
  • Procesamos las semillas activadas sin agregar agua extra, a fin de obtener una textura lo más lisa posible.
  • Agregamos sal marina a gusto, dos cucharadas de aceite de primera presión en frío (oliva, girasol, chia, lino, sésamo, coco, etc.), hierbas frescas o secas, ajo, tomates deshidratados, aceitunas, hojas de apio, morrón, jengibre, jugo de limón, semillas de mostaza molidas, ají picante, pimentón ahumado, curry de la india, pimienta, levadura nutricional en copos*, y seguimos procesando.
  • Para obtener la crema agregamos agua, en lo posible filtrada o mineral.

lunes, 7 de enero de 2013

¡Qué tiempo loco!... sí claro, el tiempo está loco

Las olas de calor frecuentes, las lluvias intensas que provocan inundaciones, las sequías extremas, los huracanes que han cambiado en frecuencia y fuerza, y los inviernos interminables hacen que salir a la calle hoy por hoy sea una aventura fantástica de J. R. R. Tolkien.
Poco identificada con Bilbo, decido salir del confortable agujero de Hobbiton preguntándome ¿por qué estos cambios climáticos tan locos? Para mi amigo Google la respuesta fue muy simple: "Calentamiento global".



El calentamiento global es el aumento gradual en la temperatura promedio de la superficie del planeta y de los océanos. La presencia en la atmósfera de determinados gases, responsables del efecto invernadero, retiene parte de la energía que el suelo emite por haber sido calentado por la radiación solar.
Como consecuencia de actividades humanas asociadas al proceso de industrialización, la concentración de estos gases en la atmósfera ha aumentado de forma considerable en los últimos años. Provocando que la atmósfera retenga más calor de lo debido, y es la causa de lo que hoy conocemos como el cambio climático.

El cambio climático tiene como consecuencia el derretimiento de los glaciares y otras masas de hielos permanentes en todo el planeta. Una situación que pone en riesgo las más importantes reservas de agua dulce del mundo. El incremento de olas de calor, inundaciones y sequías, expansión de enfermedades y el colapso de numerosos ecosistemas.

La actual situación de consumo humano está poniendo en peligro la supervivencia del planeta. El 2013 es un año para ampliar nuestra conciencia, para abrirnos a la realidad de que todos los que habitamos este planeta estamos conectados y por ende nos influímos recíprocamente. Según David Hawkins:
"En el universo interconectado toda mejora que hacemos en nuestro mundo privado, mejora el mundo en general".
Por esto propongamos ser el cambio que deseamos en el mundo, entendiendo que lo que pensamos y hacemos afecta a todo y a todos.

¿Cómo puedo beneficiar a la vida desde mi granito de arena?

"Abstenerse de comer carne al menos un día a la semana puede ser personal eficaz para combatir el cambio climático".
Ésta es la recomendación del doctor Rajendra Pachauri, presidente del Panel de Expertos del Cambio Climático de Naciones Unidas (IPCC), y ganador del Premio Nobel de la Paz en 2007 junto al exvicepresidente de EEUU, Al Gore.

La crianza de animales provoca emisiones de gases de efecto invernadero, deforestación, contaminación de aguas y otros problemas ambientales. Pachauri considera que resulta más fácil cambiar los hábitos alimenticios que los de transporte, dado el fuerte apego al coche particular. Por esa razón, recomienda renunciar a la carne durante un día a la semana, inicialmente, y después ir reduciendo a partir de ahí. A su juicio, ésta es la opción más atractiva para que cualquier individuo pueda contribuir con carácter inmediato a la reducción de emisiones.

La FAO, la agencia de la ONU para la agricultura y la alimentación, estima que la producción de carne es responsable de casi una quinta parte de las emisiones de gases de efecto invernadero.

Si comiéramos menos animales, ahorraríamos agua y tendríamos a disposición más tierra para otros usos agrícolas. Un informe del Stockholm Institute se hizo público en vísperas de la Conferencia Mundial del Agua, que se celebró en Estocolmo con la presencia de 2.500 políticos, representantes de la ONU, ONGs e investigadores de 120 países. Son muchas las propuestas que se han tratado pero quizás esta sea la más revolucionaria y simple a la vez: renunciar a la carne para tener suficientes frutas y verduras para todos.
Adoptar una dieta vegetariana es una opción para aumentar la cantidad de agua disponible para producir más alimentos en un mundo con un clima cada vez más errático, dijeron los científicos. Los alimentos ricos en proteínas animales consumen de 5 a 10 veces más agua que una dieta vegetariana. Un tercio de las tierras cultivables del mundo se utiliza para cultivos para alimentar a los animales.
Mientras que 1 kilo de carne necesita 15.500 litros de agua, 1 de arroz sólo requiere 3.000.


De acuerdo con los científicos, el régimen vegetariano podría ser una manera de aumentar la cantidad de recursos naturales disponibles para producir más alimentos y respetar el planeta.

¡Bienvenido 2013, para crecer juntos con amor!

Fuentes recomendadas: